Bernabé Saenz Valiente era un niño rico que había nacido en 1800 en Bs As . Su familia era de nobles ciudadanos y tenía a su cargo, o mejor dicho bajo su dominio, a algunos esclavos o esclavas .
Cuando él cumplió 17 años el gobierno abolió la esclavitud y se permitió que los esclavos fueran libres.
Catalina Dojan, que era la esclava que lo cuidaba, era muy querida por la familia y aunque tuvo la posibilidad de ser libre, decidió seguir sirviéndolos.
Tiempo después los padres de Bernabé fallecieron a causa de una muerte misteriosa, fue entonces cuando él decidió independizarse e irse a vivir solo y se compró una lujosa mansión en la ciudad, pero necesitaba a alguien que lo sirviera, por lo que optó por llevarse con él a Catalina, la esclava que lo cuidaba cuando era chico, sentía un gran afecto por ella a la que quería como a una tía.
Pasaron los años y Bernabé conoció a una mujer de la cual se enamoró y tuvo dos hermosos hijos. Como él y su esposa trabajaban fuera de la ciudad y estaban muy poco tiempo en la casa, Catalina los educaba y los cuidaba como debía. Bernabé estaba muy agradecido con ella y siempre tuvo un gran aprecio por la sirvienta. Pero si había algo que él no sabía, era que Catalina no era la señora buena que todos pensaban, tenía su lado oscuro . Resultó ser una narcotraficante.
Cuando Bernabé tenía 10 años la sirvienta había metido en un gran problema a sus padres. Ella tenía un negocio con la venta de drogas y lo hacía cuando los dueños de la casa no estaban: llegaba a su casa gente muy extraña en busca de drogas.
Pero un día Don Juan y Doña Elvira, padres de Bernabé, comenzaron a sospechar sobre movimientos raros en su casa, que por cierto su vecina les había comentado. Catalina por supuesto muy nerviosa se dijo: ¡estoy en problemas! Por lo que decidió dejar de vender por un tiempo, pero no fue una buena idea. Al enterarse de esto, sus clientes se pusieron furiosos, ya que ella era la única que vendía droga en la cuidad.
Inmediatamente hicieron un llamado amenazando con asesinar a los padres de Bernabé, dicho y hecho así fue, los asesinaron estrangulándolos hasta dejarlos sin vida y fueron tirados en un río.
Este secreto jamás se reveló, Catalina ya tenía 90 años y a pesar de que fue cómplice de un asesinato, vivió con la familia muchos años y compartió con ellos momentos lindos, ese fue su único y mejor recuerdo. A los 91 años falleció de cáncer y la decisión de Bernabé fue que su cuerpo fuese enterrado al lado del de sus padres...¡Al fin y al cabo Catalina llevó su secreto hasta la tumba y nunca nadie supo nada!